Si en la última jornada disputada en domingo, el Rubí cayó por la mínima por un gol de falta directa ante el filial del Sabadell, este martes los hombres de Julià García no han tenido mejor suerte. De nuevo, cayeron por 1-0 en esta ocasión frente al FC Vilafranca. Y además con un gol de penalti, dudoso para parte de la afición, en el minuto 90 de juego.
El Vilafranca salió en la primera parte a buscar el partido y dispuso de las mejores ocasiones. Se llegó al descanso con el 0-0 en el marcador, el partido bastante igualado, pero con más y más claras oportunidades para los de Vilafranca.
En la segunda parte, el Rubí saltó al terreno de juego más motivado y con más ganas de ir a por la victoria. Pero los rubinenses parecen haber olvidado su buen juego y no acabaron de llegar con claridad a puerta. Y cuando todo hacía pensar que el resultado final sería el empate a 0, llegó la jugada polémica. Fue en el minuto 90 cuando el árbitro señaló un penalti de Cervantes a un jugador de Vilafranca. Pena máxima que transformó Triguero y que sirvieron para que los tres puntos se quedaran en casa.
Segunda derrota consecutiva del Rubí, que deberá intentar rehacerse para este domingo en Can Rosés cuando recibirá al Palamós, equipo situado en la parte baja de la tabla.