El Olímpic hizo un buen partido ante el Unificación Llefià pero no pudieron ganar ante un equipo rocoso, bien plantado y con mucha veteranía en sus filas. Los locales no merecieron la derrota ya que realizaron el mejor partido de la temporada, dominando y controlando pero eso sí, sin chutar demasiado a portería, y así es difícil ganar un encuentro. Ya se conocía el potencial del Llefià, que viene de bajar de Primera Catalana y con una plantilla plagada de buenos jugadores con experiencia y que se conjuntan bien.

El Llefià puso en juego el balón y en los primeros 5 minutos fue a por todas, atacando sobre el marco local. Pero una vez pasado el tiempo, el encuentro se fue equilibrando hasta que el Olímpic le pudo jugar de tú a tú. Aun así, la falta de disparo sobre el marco contrario sigue siendo preocupante y nadie se atreve a probar fortuna desde fuere del área. La veteranía de los visitantes se hizo patente sobre todo realizando muchas faltas, algunas de las cuales no fueron sancionadas por el colegiado, un hecho que permitió a los de Badalona emplearse con cierta dureza. En este sentido, los de Can Fatjó pecaron de juventud, -la media es de 21 años-.

Con el empate a cero se llegó al final de la primera parte y la segunda se inició sin cambios. El Olímpic mantuvo a raya al adversario pero en el minuto 60 de juego David Gómez cayó junto a al delantero visitante Isra, éste tirando de veteranía ‘picó’ a David, que le propinó una mala entrada desde el suelo y fue expulsado con tarjeta roja directa. Eso obligó a Juan Moscoso a efectuar un cambio y entró el lateral Moi por Alberto, el capitán. Los visitantes aprovecharon la superioridad numérica en el campo y Ramón, que entró en el minuto 11 sustituyendo a Toni Casulleras, consiguió el único gol del partido en el minuto 68. Los locales no se arrugaron y siguieron apretando, pero en el minuto 74 se lesionó Eric, que tuvo que ser su substituido por Jonay.

El Llefià se dedicó más a defender que a atacar para aprovechar las salidas al contragolpes, aunque sin acierto. A pesar de la inferioridad numérica, el Olímpic se lanzó al ataque ante un equipo que se defendía a capa y espada. Con la derrota final, los rubinenses acumulan tres derrotas consecutivas. El Olímpic se desplazará en la próxima semana a Ripollet, para jugar a las 12 horas en el Municipal de Ripollet.